Este 23 de Septiembre, dábamos la bienvenida al otoño y con él a una “necesidad” de vestir nuestra casa de forma apropiada. Por eso, en el post de hoy hablaremos de cómo lograr la perfecta decoración otoñal para nuestro hogar, adaptándolo para una época de mayor frío, vuelta a las rutinas y dando un toque más cálido a nuestras habitaciones.

Dónde hace tan sólo unas semanas presumíamos de ir descalzos por la casa, abrir las ventanas esperando que entrase un mínimo de brisa que nos hiciese olvidarnos del exterior, ahora sólo intentamos localizar la mantita del sofá.

Independientemente de dónde vivamos y nuestros sistemas de calefacción, pocos se resisten a la mantita mientras vemos una película y buscar nuestro pijama favorito para estar por casa lo más cómodos posibles.

Si a la sensación de este fresquito otoñal sumamos las visitas por tiendas y centros comerciales con los cambios de temporada y decoración de escaparates para la vuelta al cole, comenzamos a tener esa necesidad de adaptar nuestra casa al tiempo de las hojas secas.

Pero ¿Por cómo decorar nuestro hogar en otoño?

Una vez más, partiremos de la premisa de la importancia de la comodidad en casa, antes que la propia decoración, ya que un hogar debe ser nuestro sitio de tranquilidad, no un escaparate.

Si logramos obtener una comodidad con estilo, nuestra casa será ese lugar dónde querremos pasar las horas más frías y, por qué no, divertidas de nuestro día a día.

•       Colores tostados: Uno de los signos más llamativos del invierno, son las paletas del color que encontramos en la propia naturaleza; marrones, amarillos y tostados, pasan a ser uno de los detalles que pueden dar a nuestra casa de una calidez más llamativa.
  Pero, ¿sólo estos colores?
  
  Estos colores, por lo general, simplemente nos darán un punto de contraste con el mobiliario. Un sofá de color gris o marrón oscuro, será el fondo perfecto, acompañándolo con una mantita en color tostado.
•      Calor: Cuando hablamos de calor, no simplemente hablamos de temperatura, si no de la sensación de calor. Por eso, unas velitas en el mueble de nuestro salón o unas lucecitas cálidas con un conjunto, por ejemplo de piñas secas (siempre con la máxima seguridad), nos aportará uno o varios focos más cálidos.
•         Ropa de cama: Porque no sólo vivimos en nuestro salón, a la hora de redecorar nuestro dormitorio, podemos jugar con el gran protagonista, la ropa de cama.
  Una funda nórdica o una colcha bouti en color arena o gris, combinada con un juego de cojines en color tostado, puede resultar ser el mayor cambio que puedas hacer en tu dormitorio. Cuando entramos a un dormitorio, no sólo nos fijaremos en la cama, si no en elementos básicos como las lámparas, alfombra, cortinas y decoración mural.
  Por eso, acompañar nuestra nueva ropa de cama con unas luces cálidas y unas cortinas que permitan el paso de la luz al dormitorio, con un toque de color a juego con los cojines será perfecto.
•           En tu cocina: Si muchas veces pensamos que la cocina es simplemente un lugar más de trabajo, estamos muy equivocados. Los pequeños detalles siempre son los que marcan la diferencia, independientemente de la habitación de nuestro apartamento de la que estemos hablando.
  Unas simples tazas con una cenefa otoñal para el té, unas servilletas de color yema o tostado y unos salvamanteles en color beige a juego con los servilleteros y posavasos, darán un aspecto mucho más acogedor a nuestra cocina.
  Del mismo modo, podemos innovar en estampados de paños de cocina y por qué no, el delantal a juego con unas manoplas de horno.

Como en cualquier otra estación, la decoración de tu hogar dice mucho de ti e incide de forma indirecta en tu humor. Si a la decoración añadimos fragancias suaves y una organización sencilla, convertiremos nuestra casa, apartamento o piso en un hogar.