Tras las dos primeras grandes olas de calor en España en lo que va de 2022, son ya muchos/as los que han deseado estar viviendo en una casa en el norte de nuestro país. Porque si son estos los veranos que nos esperan, ¿Por qué no plantearse comprar una casa en el norte?

Hasta hace un tiempo relativamente corto el sueño de muchos/as españoles/as lo único que deseaban era una segunda residencia en la costa más cálida de nuesto país.

Sin embargo los estragos obvios de el cambio climático trae consigo, nos hacen replantearnos este tipo de sueño.

Veranos con olas de calor de récord, subida imparable de la temperatura del mar, la prolongación de los días de calor hasta Octubre, son sin duda un cambio en nuestros veranos que nos acompañará durante mucho tiempo.

Una gran preocupación a la que intentamos encontrar una solución efectiva.

Pese a esta subida de las temperaturas, continúan siendo obvias las diferencias térmicas entre unas zonas y otras del país.

Por eso hoy hablaremos de las ventajas que tiene vivir en ciudades del norte de España, tanto por su climatología como por su estilo de vida, paisaje y calidad de vida.

¿Por qué comprar una casa en el norte?

Pese a comenzar este post con la gran ventaja que su clima tiene y tendrá, son muchas más las razones por las que comprar una casa en el norte de España.

Y es que es en esta zona del país en la que podemos encontrar una gran unión entre el mar y la montaña, una combinación perfecta que nos deja paisajes únicos creados por la naturaleza y en la que podemos disfrutar toda una vida.

Rutas por la montaña, actividades deportivas en plena naturaleza tanto en rutas de senderismo como con deportes de nieve en sus pistas de esquí.

Una España que puede presumir de grandes playas en las que surfear o simplemente disfrutar de sus vistas e increíbles acantilados.

Una gastronomía reconocida a nivel mundial, productos de primera categoría en tierra y mar.

No hablamos sólo de sus famosos potes, caldos y platos de cuchara. En el norte de nuestro país contamos con una gran calidad en pescado, mariscos y una carne única.

Se trata de una tierra con un gran contraste si hablamos de grandes ciudades ya que podemos disfrutar de espacios abiertos rodeados de una gran extensión de naturaleza, un bajo nivel de estrés y mucha tranquilidad.

Pese a que el bienestar de una familia dependerá de un gran número de factores, trasladarse a una ciudad como Lugo, Vigo o Santander, nos ayudará siempre a conocer otro día a día en el que respirar la naturaleza que nos rodea desde nuestra propia casa.

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