Ya vivas de alquiler o en propiedad, la factura de la luz y el bienestar ambiental de nuestro hogar puede cambiar nuestro día a días. Hoy os contamos qué tipo de luz debemos utilizar en cada habitación. Y es una una iluminación correcta puede ayudarnos a desde descansar mejor a tener un mayor rencimiento en zonas de trabajo, poder ver la televición con una mayor comodidad y ambientar un cuarto de baño con la mayor efectividad y elegancia.

Tal y como hemos hablado en otras ocasiones, el consumo de iluminación LED será el más aconsejado por su gran durabilidad y ahorro a medio y largo plazo en la factura de la luz.

¿QUÉ TIPO DE LUZ DEBEMOS UTILIZAR EN CADA HABITACIÓN?

• Para el salón: Hablamos de la habitación más importante de la casa, en la mayoría de los casos. Ya que en esta zona de la casa tendemos a reunirnos con la familia, amigos, leer o simplemente ver la televisión. Es uno de los lugares en los que más tiempo y esfuerzo destinamos a la decoración, a crear un ambiente cómodo, estético y acogedor. En cada uno de estos parámetros incluimos, como no, el tipo de luz que utilizaremos, su disposición, color e incluso forma de apliques, lámparas y un largo etcétera.
  
  Combina las lámparas de techo con pequeñas lámparas que puedes colocar en una cómoda o en una mesita junto al sofá y que ofrezcan una luz más cálida. En la zona del comedor necesitas una luz más intensa y algo más fría.
  
  
• Iluminación en la cocina: Otra de las grandes protagonistas en muchos hogares, ya no sólo sirve para preparar los platos o pasar horas limpiando y cocinando. Las cocinas se convierten en un lugar en el que reunirse, en el que innovar con colores, iluminaciones y espacios sin dejar de ser por ello una zona de trabajo.
  
  En este caso utilizaremos de forma mayoritaria luces de tonos fríos para la iluminación general, pudiendo dar un toque de calidad y efectividad con luces empotradas. En los últimos años además son muchos/as los/as que optan por la instalación de tiras led en las molduras o en la parte baja de los armarios.

• Iluminación para el dormitorio: pese a que muchas personas abandonen la idea de la innovación en los dormitorios, podemos combinar diferentes tipos de luz. Partiendo de la básica, que es la luz de techo, siempre recomendamos tener puntos de luz dirigidos a zonas concretas del dormitorio, como los armarios.
  Además las lámparitas de noche son siempre la opción más socorrida, con una luz cálida y cercana, que nos permita regular la intensidad de la habitación de una forma más individual.

• Iluminación en el cuarto de baño: pese a tener siempre en mente un cuarto de baño con una luz natural de ensueño, la verdad es que no siempre es posible disponer de este tipo de luz, por lo que la instalación de los puntos de luz toma aún más relevancia. En este caso, el protagonismo lo tendrán las luces de techo, a ser posible empotradas con una luz intermedia entre el frío y el calor.
  
  No obstante, no son las únicas luces de esta estancia. Uno de los puntos más fuertes del cuarto de baño, será el del lavabo, donde normalmente nos peinaremos, maquillaremos y asearemos. Debemos elegir una luz no demasiado cálida ni fría para que podamos, sobre todo, maquillarnos como deseamos.

• En otras zonas de la casa: pasillos, escaleras, entradas, etc. En este caso, podemos optar por luces empotradas que nos sirvan simplemente de guía pero que permitan jugar con la decoración y hacer de estas estancias, lugares más acogedores.

Sabemos que cada casa es un mundo diferente, con distintas necesidades, gustos y funcionalidades, por eso, os animamos a conocer los tipos de luz por los que podemos optar para dar una mayor vida a nuestra casa.